Saber anticiparte es la habilidad que mejor te ayudará en carretera en situaciones donde haya condiciones climatológicas adversas que limiten la capacidad técnica del automóvil. Consulta el parte meteorológico antes de ponerte a los mandos de tu coche y revisa que las condiciones de tu vehículo son las adecuadas.
Aunque España no sea, en términos generales, un país de frío extremo, las condiciones geográficas de sus distintas zonas hacen que los desplazamientos en automóvil puedan suponer ciertos riesgos. Es importante tener precaución a la hora de ponerse al volante en invierno y prestar mucha atención a los consejos básicos de seguridad que ofrecen los profesionales en el caso de tener que conducir con nieve.
En compramostucoche.es hemos reunido información variada para que conducir con nieve no sea un elemento ajeno para ti, y para que puedas estar preparado en caso de que esto suceda. Lee con atención y, aunque parezca algo extremo, retrasa tu viaje para otro momento si las condiciones meteorológicas no son las más adecuadas.
1. Distintos vehículos frente a la nieve
Cuando vas a conducir con cierta frecuencia sobre nieve o hielo, la elección de tu vehículo puede ser determinante para ti. Los SUV o los coches con tracción integral presentan una mayor adaptabilidad al medio ambiente que otros turismos convencionales. Si no quieres cambiar de coche, o no conduces con frecuencia ante condiciones meteorológicas adversas, las cadenas son la alternativa más frecuente en España, tanto las convencionales como las de tela.
Cómo conducir con nieve sin cadenas
Si no quieres cambiar de vehículo ni conducir con cadenas, la alternativa son los neumáticos especiales para invierno, más seguros en cualquier caso que conducir con nieve con tracción trasera con ruedas de verano.
En España el uso de neumáticos de invierno no es muy frecuente, ya que no son necesarios para conducir con lluvia, algo más común en el norte del país. Sin embargo, en otros países europeos como Alemania o Suecia, el uso del neumático de invierno está marcado por ley, ya que están diseñados para mejorar el agarre y la capacidad de frenada, mantener la estabilidad en las curvas, y presentar una mayor resistencia a temperaturas bajo cero. Amén de la comodidad de no tener que pararse a instalar las cadenas en pleno temporal.
Otros sistemas de ayuda a la conducción de los que puedes hacer uso en casos extremos serían el ABS (sistema antibloqueo de ruedas) o el ESC (sistema de control de estabilidad), que te ayudarán a conducir con nieve y hielo o lluvia extrema.
2. Revisa tu vehículo antes de salir a la carretera
Si la previsión meteorológica indica que vas a tener que conducir con nieve es importante que revises tu coche antes de salir en carretera, y que, dependiendo de las circunstancias (cantidad de nieve, temporal, capacidades del vehículo, tracción de las ruedas), optes por retrasar tu viaje cuando sea necesario.
Entre otras precauciones para conducir con nieve es importante que tengas en cuenta lo siguiente:
- Revisa el nivel de líquidos de tu vehículo, incluyendo el líquido anticongelante y el del parabrisas.
- Pon especial atención también en la dirección del coche y los frenos (discos y pastillas).
- Cuando bajan las temperaturas, al coche le cuesta arrancar, algo que puede afectar a las baterías, por lo que no está de más comprobar la carga antes de salir, o cargarlas en casa en los meses de invierno.
- Comprueba que las luces funcionan correctamente y limpialas para mejorar la visibilidad en carretera.
- Revisa que las escobillas del limpiaparabrisas se encuentren en buen estado, para que puedan arrastrar la nieve sin problemas.
- Asegúrate de que el depósito del combustible se encuentra a su máxima capacidad.
- Lleva en el maletero cadenas o neumáticos de invierno y, si no sabes cómo se utilizan, consulta vídeos o tutoriales que podrás encontrar en internet fácilmente.
- Comprueba la correcta presión de las ruedas y el estado de los neumáticos. El surco de los mismos debería ser de al menos 4 mm para asegurar una correcta tracción en carretera, especialmente en los meses de invierno.
- No olvides cargar tu teléfono móvil para que puedas utilizarlo en caso de emergencia.
Conducir con nieve y hielo. Cuando el asfalto se enfría, si está húmedo y a la sombra es probable que se formen placas de hielo que en ocasiones no pueden ser visibles en contraste con la calzada o porque se encuentran escondidas bajo la nieve.
3. Consejos para conducir con nieve
Es conveniente tener cierta información para saber cómo conducir con nieve y en otras condiciones meteorológicas adversas.
- Los nervios pueden llevarte a realizar maniobras bruscas, o impedirte el decidir con tiempo qué maniobra debes ejecutar. Conducir con suavidad y sin movimientos bruscos en la dirección, la aceleración y el frenado, es un factor esencial que te ayudará a prevenir deslizamientos e inestabilidad en el automóvil.
- Uno de los errores que se cometen con más frecuencia al conducir con nieve es girar el volante en exceso, lo que puede provocar que el coche realice un subviraje (tendencia a seguir recto en curvas). Intenta reducir el uso del cambio de marchas y usar marchas largas para evitar la pérdida de adherencia.
- La distancia de seguridad es crucial al conducir con nieve para evitar colisiones si pierdes el control del coche.
- En el momento de arrancar el vehículo debes tener también algunas cosas en cuenta. Si vas a conducir sobre nieve con marchas, debes comenzar con la segunda velocidad para evitar casos de patinaje de los neumáticos.
- Es muy importante igualmente que, al frenar, lo hagas en línea recta y no en las curvas donde las ruedas tienen menos adherencia, pisando el pedal de freno con mucha suavidad. Y siempre, si se puede, frenar con el motor.
Nunca olvides que la mejor seguridad es siempre la precaución al volante. Abre bien los ojos y pon todos tus sentidos en la carretera.